ADOSADOS
¡CUIDADO CON ESAS MANITAS!
FOTOGRAFÍA: JOSÉ LUÍS ABALO ABALO
TEXTO: SANTIAGO PAZOS
Rechazo de plano esa frase hecha que dice que una imagen vale más que mil palabras. No sé si José Luís estará, o no, de acuerdo conmigo, él es el imaginero. Yo creo que el ojo, la mirada, subjetivizan y transforman la realidad, la interiorizan de un modo único, exclusivo. Es decir, aunque cien ojos miren un mismo objeto cada uno de ellos lo verá de forma particular. Una vez que la imagen llega al cerebro, son la cultura, la memoria y las vivencias personales, físicas y sentimentales, las que se encargan de darle una interpretación sesgada.
Por otra parte, dudo que exista algo llamado objetividad más allá del convencimiento personal. Bueno quizás como concepto científico sí, pero no pienso preguntar para que no me destrocen el razonamiento.
La cuestión es que la señora de la bonita blusa de lunares mira de reojo hacia San Roque, o hacia su perro, con la desconfianza que tienen los que dejan su espalda al descubierto.
¡A este cuerpo serrano ni un roce lujurioso, ni una mirada lasciva!, parece decir ella para sus adentros. Y por si acaso, la cartera bien agarrada bajo el brazo, que ya se sabe que lo que más le gusta al santo es Santa Limosna.
Además, la señora pensará como pienso yo, contra la mayor epidemia que sufrimos ahora, la avaricia de los banqueros, ni San Roque, ni su perro, pueden salvarnos.
Y el Santo Patrón de los falsamente acusados y su perro sin rabo aguantan el chaparrón quietecitos como estatuas.
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