PUB SILFO
Cuando este verano nos enteramos que Antón Guitoi cerraba el Silfo, muchos sentimos que se cerraba también una página de nuestra biografía personal. Después de tantos años de bregar contra tantas crisis, reales o inventadas, el Silfo se había convertido por derecho en uno de los templos históricos de la movida de Carballo.
No pretendo ahora relatar una historia del local. Otros, empezando por Antón, podrán hacerlo con mucho mejor conocimiento y yo estaré encantado de publicarlo en intrusosenlared.
El motivo de esta reseña es felicitarnos porque afortunadamente el Silfo reabre sus puertas, ahora todos los días a última hora de la tarde, regentado por el amigo Santi.
Sería bueno que no le dejásemos solo en esta aventura de rescatar un lugar tan emblemático. Suerte
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